viernes, 30 de julio de 2010

Algo parece que falta.

Tanta sensibilidad me aterroriza y hace que me duelan hasta las uñas de los pies. Más encima la maldita aparece cuando se le da la gana, ni siquiera avisa. Por último golpeara la puerta, pero no, la muy patuda llega y entra como Pedro por su casa invadiendo hasta el más recóndito rincón de este cuerpo mutilado.

viernes, 16 de julio de 2010

La soledad tiene color amargo.

Al final, todo queda ahí: en nada. A medio hacer o sin hacer.
Hoy sentí el frío y sentí reventarse mi alma por los pies, caminé por calles vacías anaranjadas de soledad, me senté en cada plaza y con todas mis arterias envidié a los amantes. Siempre sola, pensando en cómo sería si... Y claro, como siempre, no llego a conclusiones.
Me pregunto si alguna vez volveré a sentir.
Luego, intento responderme... y el diálogo conmigo misma cada vez se dificulta más.
Ni siquiera me escucho.

jueves, 15 de julio de 2010

Frágil eternidad.

Todo aquello que creí eterno
se tornó frágil, enfermo
quebradizo como las hojas de este invierno
resbaladizo cual incomodo silencio.

Aquél verde roble fuerte
con raices de piedra y tronco de miel
hoy entra en madera, vuelve a creer
luego la tierra, antes del ser.